Isabel Gomariz Montoya

54 años. Ama de casa
Cabezo de Torre (Murcia)

Isabel se acaba de dejar 118 euros en la farmacia, sólo en medicinas contra el colesterol. Las toma ella, su hermana Juana y dos de sus hijos, Isabel (24 años) y Eduardo (18). Se enteró hace 23 años de que tenía colesterol, al descubrírselo a su hermana en una revisión de empresa. Su padre, que murió a los 72 años, tras dos infartos, también lo tenía. “Quiero ver aquí a toda la familia”, les dijo el especialista. Y de las 5 hermanas, Juana e Isabel lo habían heredado. “Fue una sorpresa, tenía cuatrocientos y pico”, dice. A raíz de esto, vigiló a sus hijos desde chiquitos. El mayor, José Jesús (32 años) y el tercero, Alejandro (23) no tenían, pero sí la niña, Isabel y sobre todo el pequeño, Eduardo, que “tenía más de 300 con 3 añitos, el pobre”. Comenta que, “durante muchos años, los especialistas nos decían que no había nada para nosotros”. Luego salieron las estatinas y hace 10 años que las toman los cuatro: Isabel, su hermana y sus dos hijos. Y ahora, Isabel y Juana están probando el nuevo fármaco Ezetrol. Además de la medicación, Isabel anda mucho (“hora y pico a paso ligero”) y come sano (“de todo, pero con moderación, sin fritos ni grasa. Y mucha fruta, que a mis hijos les gusta poco…”). El último control, en abril, “ha sido el mejor de todos”, con menos de 300 de colesterol. “Mi mayor lucha es la económica, conseguir la aportación reducida”. Después de meses de visitas, papeleos, llamadas a la radio y mil gestiones, Isabel consiguió hace dos semanas que Sanidad le devolviera 58 euros. Pero si quiere seguir cobrando lo que paga de más en la farmacia, tiene que ir juntando recetas, hacer nuevas gestiones y presentar más fotocopias. “Quieren que me aburra, pero no lo van a conseguir”. Ánimo.