El infarto de miocardio en la mujer es diferente que en los hombres

El riesgo de muerte en la mujer después de presentar un infarto de miocardio sigue siendo mayor que en el hombre, posiblemente debido a la menor utilización de recursos diagnósticos y terapéuticos en la mujer que en los hombres. En muchas ocasiones mujeres y hombres presentan un cuadro clínico similar con dolor en el pecho de inicio súbito y opresivo y que frecuentemente se irradia a brazos a cuello. Pero en las mujeres muchas veces predominan otros síntomas como dificultad respiratoria, fatiga o sensación de indigestión.

Un documento reciente de la American Heart Association hace una revisión exhaustiva de múltiples aspectos relacionados con el infarto agudo de miocardio (IAM) en las mujeres. En esta actualización se repasa desde la epidemiología hasta el pronóstico, pasando por la presentación clínica y el tratamiento.

La prevalencia de cardiopatía isquémica en EE.UU. afecta a 6,6 millones de mujeres, de las cuales 2,7 han tenido IAM previo; con una mortalidad en el primer año tras el IAM, independientemente de la edad del 26%, frente al 19% en los varones. A pesar de que la edad media de las mujeres que ingresan por un primera IAM es significativamente mayor que la de los hombres (71,8 vs. 65 años), es muy inquietante que hay un aumento de mortalidad en el grupo de mujeres más joven, de 45 a 55 años.

En muchas ocasiones mujeres y hombres presentan un cuadro clínico similar con dolor en el pecho de inicio súbito y opresivo y que frecuentemente se irradia a brazos a cuello, acompañado de sudoración, náuseas o vómitos. Pero en las mujeres muchas veces predominan otros síntomas como dificultad respiratoria, fatiga o sensación de indigestión. Esto hace que las mujeres suelen llegan más tarde al hospital, reciben menos tratamientos de angioplastia o reperfusión y menos cirugía de revascularización coronaria que los hombres, así como menos esfuerzos en la prevención y en el tratamiento después del alta. La sintomatología atípica junto con la menor percepción de riesgo por las propias mujeres parece ser el principal motivo de retraso en solicitar y, por tanto, recibir asistencia. Otro hallazgo negativo es que la prevalencia de muerte súbita como primera manifestación de la enfermedad ha aumentado en las mujeres.

En cuanto a los factores de riesgo cardiovascular es muy preocupante el aumento del tabaquismo en las mujeres menores de 55 años. También la hipertensión arterial que constituye el principal factor de riesgo en mujeres y la elevación del colesterol-LDL (colesterol malo), predictores de muerte cardiaca sobre todo en mujeres <65 años. Otro problema muy importante en las mujeres es el aumento progresivo de la obesidad, que afecta a la tercera parte de las estadounidenses y su asociación con la diabetes. Los factores psicosociales como la depresión y el estrés también tienen efectos nocivos, observándose en las mujeres peor salud física y mental, lo que se asocia con peor evolución post IAM.

A pesar de que las indicaciones terapéuticas son comunes para hombres y mujeres, el tratamiento de reperfusión en el síndrome coronario agudo, tanto farmacológico como intervencionista (angioplastia), sigue mostrando en general diferencias entre ambos sexos, pues se aplica menos y existe una mayor mortalidad en las mujeres. Se describe nuevamente la mayor tasa de complicaciones post-IAM. Los tratamientos farmacológicos y los indicados en prevención secundaria son también los mismos, pero siguen siendo infrautilizados en la población femenina. Un tema interesante que se aborda es la terapia no farmacológica, incidiendo en la escasa, casi nula, incorporación de las mujeres a los programas de rehabilitación cardiaca.

En las directrices futuras, para cerrar la brecha en la disparidad de la atención a las mujeres, se destaca la baja tasa de inclusión de mujeres en estudios, con una media del 20%. Se insiste en la necesidad de implicación de los profesionales, autoridades sanitarias, las propias mujeres, entorno familiar y agencias gubernamentales para cambiar esta actitud.

Referencia: Infarto Agudo de Miocardio en Mujeres. A Scientific Statement From the American Heart Association. Circulation 2016.