Continúan las Jornadas de Detección de Hipercolesterolemia Familiar en Sevilla

Andalucía es la Comunidad con el mayor número de diagnósticos genéticos de Hipercolesterolemia Familiar (HF) en el estudio SAFEHEART. Y Sevilla marca la diferencia dentro de Andalucía. El fin de semana 26-27 de Octubre, hemos vuelto al Hospital Virgen del Rocío, en donde una vez más nos hemos encontrado con todas esas familias con las que hemos venido hablando en estos últimos meses en los que hemos tenido la oportunidad de conocer su historia familiar de HF, que nos ha permitido dibujar los diferentes árboles cuyas ramas familiares nos vinculan con un tronco común, de donde parte esa herencia que en la HF se va transmitiendo, independientemente de padres a hijos, tanto sean hombres o mujeres.

Es importante destacarlo porque ocurre con frecuencia que al organizar ese árbol familiar que nos acerca a la detección en cascada, existen falsas creencias sobre quien hereda la HF. Ahora todos sabemos que la heredan tanto los hombres como las mujeres y cualquiera de ellos la pueden transmitir a la mitad de su descendencia.

El hecho de encontrarnos de nuevo a Sevilla, hace que algunas ramas familiares, como es el caso de la Carrera y algunas otras se vayan sumando en diferentes fases, y como en esta ocasión nos pregunten si es que en Sevilla hay más prevalencia de HF que en el resto de España. Sin embargo, no parece que la razón de volver a Sevilla, haya que buscarla en una mayor prevalencia, sino en una mayor actividad hacia la detección de familias con HF en el equipo que dirige el Dr. Ovidio Muñiz en el Hospital Virgen del Rocío, en donde han potenciado el Servicio de Medicina Interna con el seguimiento de la HF, y se está convirtiendo en un referente de toda la provincia. De ahí que en este fin de semana nos han llegado familias de Lora del Rio, Bormujos, Salteras , Umbrete, Mairena del Alcor, y así un largo etc, sin olvidarnos de la familia García Reyes procedente de Ayamonte (Huelva) , o la familia Jimenez Morato muy numerosa, que venían de Puerto Serrano (Cádiz).

Debemos destacar que en esta ocasión nos han acompañado algunos familiares procedentes del hospital Valme, en donde acuden a la consulta de la Dra. Patricia Rodriguez. Y este podría ser un primer paso para que cada vez sean más numerosos los centros de referencia. Y así la HF se asumirá como lo que es, un trastorno crónico que nos acompaña toda la vida porque es de origen genético y por tanto la traemos desde el nacimiento. Pero lo importante es que tiene tratamiento para prevenir la enfermedad cardiovascular prematura. Y en esta línea, Antonio Fernández, expresaba todo su agradecimiento a esta iniciativa de la Fundación y a la necesidad de hacer visible esta enfermedad silenciosa. También Mª Isabel la esposa de Jesús María Dominguez, mostraba su preocupación y su deseo en seguir el mejor tratamiento para evitar el infarto, que lamentablemente había sufrido alguien de su entorno con solo 38 años.

En el caso de la Familia Jiménez, que podrían haber heredado la HF de sus dos progenitores, les parece que todas las medidas de prevención son pocas para evitar que sus hijos no sufran los infartos que sí han sufrido sus tíos, o las limitaciones asociadas con los accidentes cerebrovasculares.

En esta Jornada a la que han acudido 102 personas, es importante destacar que aún nos queda pendiente sensibilizar a esos jóvenes veinteañeros que se creen invencibles, como Julia, Ángela, Francisco Javier etc. que a pesar de que el infarto ha sorprendido a varios de sus familiares, su respuesta sigue siendo la misma “yo me siento bien”. Por eso, la concienciación debe empezar en la infancia porque el colesterol elevado no duele. De ahí, la responsabilidad de los padres que con niños en edades comprendidas entre los 3 y 11 años, y conociendo bien las consecuencias de la HF han acudido a esta Jornada, no solo para realizar el estudio genético, sino también para conocer todo acerca del tratamiento y cuando debería iniciarse. También la alimentación de los pequeños, les suele preocupar más que la de los mayores. Como comentaban algunas mamás, tratan de evitar la bollería industrial y las chuches en el día a día, aunque en los cumpleaños se intenta abrir un poquito más la mano.